(y eso cambia todo)
Estamos rodeados de datos.
Dashboards, informes, KPIs, gráficas, Excel con nombres eternos y colores que se mezclan como código morse.
Y sin embargo… seguimos sin entendernos.
Porque informar no es lo mismo que comunicar.
Y si trabajas con datos, saber la diferencia no es un lujo: es una necesidad.
📌 Informar es entregar datos. Comunicar es provocar una reacción.
Un informe que llega por correo no cambia decisiones.
Un gráfico que nadie entiende no construye acción.
Un Excel sin contexto puede incluso desinformar más que ayudar.
💡 He aprendido (a veces por las malas) que no basta con que el dato esté bien.
Tiene que ser relevante para quien lo recibe.
Tiene que estar en el lenguaje adecuado.
Y, sobre todo, tiene que contar algo.
📊 Aquí entra el storytelling con datos
No se trata de disfrazar los números ni de edulcorarlos.
Se trata de darles estructura, intención y contexto.
Un buen análisis tiene:
- Inicio: ¿Qué estábamos mirando? ¿Por qué es importante ahora?
- Nudo: ¿Qué vimos? ¿Qué sorprende? ¿Qué cambia el foco?
- Desenlace: ¿Y ahora qué hacemos con esto?
No se trata solo de “reportar”, sino de narrar con propósito.
👉 Porque una gráfica bien explicada puede abrir una decisión.
👉 Y una tabla mal enfocada puede matar una idea que valía la pena.
🧠 ¿Por qué es tan importante esto?
Porque si no sabemos comunicar bien nuestros datos:
- Tomamos decisiones con información parcial o mal entendida.
- Perdemos la atención de quienes sí podían ayudarnos a actuar.
- Dejamos que lo visual gane al contenido, o al revés.
- Convertimos el dato en ruido, no en claridad.
Y eso, en entornos donde cada decisión impacta presupuesto, pacientes o estrategia, es un lujo que no podemos permitirnos.
✍️ ¿Entonces, cómo lo hacemos mejor?
✔️ Cuenta siempre el “por qué estás mostrando esto”.
✔️ Elimina lo que no suma. Más no es más.
✔️ Adapta el lenguaje: lo que necesita un equipo médico no es lo mismo que un KAM.
✔️ Cierra con una pregunta, una decisión o una hipótesis que mueva a la acción.
✔️ Usa los datos como parte de la historia. No como final en sí mismo.
💡 Comunicar con datos es una habilidad blanda… que se entrena duro.
Porque en el fondo, lo que queremos no es llenar un informe.
Queremos que algo cambie.
Que quien lo lea entienda, conecte, decida, actúe.
Los datos informan. Las historias conectan.
Y solo cuando hay conexión… hay transformación.

Deja un comentario